La Virgen María (16)

María, Madre de la Reconciliación

Autor: Fr. Carlos Lledó López O.P.


 
 



 

MEDITACIÓN
 

MARÍA, MADRE DE LA RECONCILIACIÓN




MARÍA, MADRE DE LA RECONCILIACION


María es Madre de la reconciliación entre Dios y el hombre.

La naturaleza humana estaba enemistada con Dios por el pecado original que se transmite por vía de generación. La reconciliación se realiza en Cristo Redentor que perdona el pecado.

María es Madre de la Reconciliación porque es Madre de Cristo. Al calor del Corazón de María se reconcilia lo humano y lo divino. María se convierte así en Madre de la gran Reconciliación.

Cristo repara y perdona lo que el hombre no puede reparar ni perdonar y María es Madre de la reparación y del perdón.

Cristo causa la gracia que se nos aplica por los sacramentos en la Iglesia y María es Madre de la gracia que nos conduce a la reconciliación, al sacramento de la Confesión.
 

La Penitencia.

El Sacramento de la Penitencia nos perdona el pecado personal cometido después del Bautismo y nos reconcilia con Dios, con la Iglesia y con los hermanos.

El Sacramento nos devuelve la vida frente a la muerte del pecado mortal por el perdón. También nos hace fuertes en la voluntad frente a la debilidad del pecado venial y nos mantiene en “tensión de santidad”. El Sacramento es siempre fuente de paz interior, la que Cristo nos da que no es la paz de este mundo (Cf. Jo.14, 27).

María está presente en el Sacramento del Perdón como Madre que recoge al hijo herido entre sus brazos y trata de curarlo porque es Madre del Médico que todo lo sana, porque es Madre del Gran Perdonador que perdona y olvida, porque es Madre de la Sangre derramada que lava y purifica, porque es Madre Asunta al Cielo que no cesa de interceder por nosotros y salir al encuentro de los hijos pecadores, débiles e inconstantes.

"Ave escalinata celestial, por donde Dios ha bajado. Ave, puente de tránsito para aquellos que de la tierra pasan al cielo"

 



    


 

 
 


             Autor: Fr. Carlos Lledó López, O.P.