La Virgen María (13)

María, Madre del Amor

Autor: Fr. Carlos Lledó López O.P.


 
 



 

MEDITACIÓN

 

MARÍA, MADRE DEL AMOR

 



MARÍA, MADRE DEL AMOR.

María es Madre del Amor.

Porque es Madre de Dios, que es Amor (Cf. 1ªJo.4, 8.16). Porque Cristo, su Hijo, Dios hecho hombre, es amor-donación del Padre (Cf. Jo.3, 16).

Porque es Madre del misterio de la Iglesia, animada por la presencia y acción del Espíritu de Amor.

María es modelo de Amor.

La invocamos como Esposa del Espíritu Santo por su entrega y fidelidad.
En efecto, se deja amar por Dios todo lo que quiere amarla: "Dios te salve, llena de gracia, el Señor está contigo" (Lc.1,28).

Se deja conducir, sin condiciones, por el Amor: "No temas, has hallado gracia. El Espíritu Santo está sobre ti. (Lc.1,30.35). Se entrega totalmente a la obra del Amor: Aquí está la esclava. Hágase en mi según tu palabra (Lc.1,38). Toda su vida será testigo del Amor desde el Magnificat (Cf. Lc. 1, 46) hasta la Cruz (Jo. 19, 25-28)
 

Nosotros.

Tratemos de imitar a María. Seamos fieles al amor de Dios que nos ha sido dado: “El amor de Dios se ha derramado en nuestros corazones por virtud del Espíritu Santo que nos ha sido dado” (Rom. 5, 5b) Somos portadores de un misterio de amor de Dios Padre que nos bendice, nos predestina y nos santifica en Cristo por obra del Espíritu Santo: "Bendito sea Dios" (Cf. Ef.1,3-14).

Somos miembros de la Iglesia, depositaria y administradora del Amor de Dios. En efecto, la Iglesia causa en nosotros el amor de Dios y nos hace crecer en el mismo, principalmente por los sacramentos.

Por lo tanto, aprendamos de María a dejarnos amar todo lo que Él quiere amarnos, a entregarnos sin reservas a las exigencias del amor a Dios y a ser testigo de su amor en medio del mundo.

 


 

   

 

 
 


             Autor: Fr. Carlos Lledó López, O.P.